Esto nunca será Egipto (II)

"Pondremos un tutor a maestros que necesiten mejorar sus clases". "Queremos garantizar el éxito educativo" 

El Correo de Andalucía publicaba el 23 de enero una entrevista a Francisco Álvarez de la Chica, de la 4ª Dinastía de la Consejería de Educación (leer entrevista).

¿Qué significa para estos políticos “buenos resultados” en el mundo de la enseñanza? Que aumente el número de aprobados y de titulados, para así abandonar las escandalosas tasas de abandono y fracaso escolar. Exactamente esos son los mismos objetivos que perseguimos los que damos clase en las aulas, y no desde los despachos; el problema es que el camino para llegar a eso no es el mismo para unos y para otros. Para ellos, el fin es mejorar las estadísticas; para nosotros es enseñar, formar y garantizar a la sociedad que quienes obtienen el título de Bachillerato, de ESO o de FP han adquirido unos conocimientos que revertirán, con el tiempo, en el progreso y mejora de ellos mismos y de esta sociedad. Es muy sencillo. El carné de conducir se obtiene si uno demuestra que es apto para salir a la carretera con un coche. El Ministerio de Interior no dispensa carnés a todo el mundo, sino que garantiza que quienes lo poseen no son una amenaza para el resto. El fracaso escolar, el abandono, no son más que un reflejo de las políticas educativas, y no de las malas prácticas de los profesionales, que no han hecho sino aplicar lo que otros han ideado.
Si de lo que se trata es de elevar el número de titulados, es más fácil y barato enviárselos por correo a todos los alumnos cuando cumplen los 16 años; y que quien quiera aprender, que vaya a la escuela. ¿Haríamos lo mismo con los conductores? ¿Y con los médicos?

[Pegatina de campaña electoral del sindicato PIENSA-Volens]

Necesitan huir de la realidad, fingir que este no es un problema que ellos crearon, no pueden reconocer que este fracaso es su fracaso, que se debe a su política, hecha sin contar con los profesionales, diseñada por personas ajenas a esta profesión, que encontraron en esto un gran negocio con el que lucrarse. Pero un negocio hecho a costa de destrozar el futuro de las personas.

Para este señor -dice que es maestro de profesión-, para toda la caterva de la Pedagogía, la casta de despacho y subvención, de CEP y AGAEVE, de Comisariado Político, de Inspección, para toda esa gente que abandonó las aulas hace años, si es que alguna vez las pisó; lo importante es maquillar lo que todo el mundo sabe: esta política educativa es y ha sido nefasta.

Para esa operación de cirujía estética, no dudaron hace unos años en intentar sobornarnos pagando 7000 euros a cambio de más aprobados; a esto lo llamaron “comprometerse con la calidad de la enseñanza”. Como ese soborno fue rechazado mayoritariamente, ahora pretenden obligarnos a aprobar a quien no lo merece, con una agencia (AGAEVE) formada por “expertos” que le tienen pavor a las aulas y que “evaluarán” nuestra labor docente para detectar nuestras necesidades formativas, en el caso de que nuestros resultados no sean satifactorios... es decir, quieren obligarnos a olvidar nuestra ética profesional; el siguiente paso, ya próximo, es hablar de “productividad”, lo que el Consejero IV llama “rendición de cuentas”: si no quieres que te abra un expediente, aprueba a más.
Para eso llevan años creando las piezas de esta perversa maquinaria. El ROC es el lubricante:

1. ya han formado a su Inquisición: Inspección no-Educativa y Directivas deseosas de medrar , de afianzar su sueldo (tras siete años de cargo) a base de renunciar a toda ética profesional y alejarse del aula.
   
2. ya tienen preparadas las prebendas para los delatores: el neoDepartamento Deformación, Evaluación e Innovación contará con una jugosa reducción horaria, y será asesorado por la AGAEVE, esa Agencia de expertos.
3. de la misma manera, los colaboracionistas recibirán también su botín, en forma de menos horas de clase...lo que siempre han buscado: son los "Coordinadores de Competencias".
4. se sacará de las aulas a los profesores "con mejores resultados", para que "enseñen a sus compañeros buenas prácticas educativas" en los CEPS ... de nuevo el "premio" que deseaban: no dar clase, y de nuevo los CEPS, esos centros de gente que lleva siglos sin oler tiza.
   

Como vemos, todo funciona de la misma manera,  "ayúdanos a implantar nuestra política educativa y a cambio dejarás de dar clase".

SI NO QUERÉIS DAR CLASE, 

 ¿POR QUÉ NO OS DEDICÁIS A OTRA COSA?

¡¡SACAD VUESTRAS MANOS DE NUESTRA PROFESIÓN!!